9 de Octubre Día de la Comunidad Valenciana, hoy un día triste para andar de celebraciones. Somos los primeros en lo malo y los últimos en lo bueno. No hay nada que celebrar. Independientemente de cualquier ideología los ciudadanos y ciudadanas de esta Comunidad sentimos y vivimos que vamos de mal a peor año tras año, con un déficit que supera toda previsión, una deuda incontrolable, donde ha caido la industria del calzado, del mueble, del azulejo y la industria en general. Es la Comunidad donde mas pequeñas y medianas empresas han cerrado. Las cosas no van bien y la gente lo sabe, por eso el sabor amargo y hasta doloroso de este 9 de octubre.
No hay banderas que ondear cuando se tiene el
30 % de paro, o cuando la corrupción campa a sus anchas en la administración
valenciana. No hay banderas que ondear cuando
hay un Presidente DEBIL y PRISIONERO de las corrupciones de su propio partido.
La Comunidad Valenciana atraviesa desde hace casi 20 años un proceso
constante de empobrecimiento de los valores, tras pirámides de especulación y
corrupción. Hoy es poco lo que queda en
pie de lo que fue y mucho menos de lo que podría haber sido. Sólo palabras
vacías, o fanfarronerias como las que se le llenará la boca al PP valenciano
este miercoles institucionalizando, una vez más la manipulación y la mentira.
Esperemos que no dentro de
mucho, desde el orgullo, el progresismo y la capacidad emprendedora de los
valencianos y valencianas, volvamos a un 9 de octubre que nos sea digno y
merecido, por sus valores de transparencia, sus acciones de crecimiento, sus
gestos de democracia.
De todas formas, feliz día. Por lo menos que este festivo nos sirva
para pensar que está pasando en nuestra magnifica tierra, hacia donde nos ha
llevado 20 años de gobierno del PP y pensar dos veces nuestras presentes y futuras acciones
democráticas.
Un saludo
Gloria Calero
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